Nueva escena de rol: La fiesta, primera parte

Punto de vista: Diego

Llegó el gran día. Nuestros amigos que han están en casa de los abuelos de Diego, ahora salen hoy sábado, a las 9 de la noche, todos en la camioneta de Diego hasta el salón donde se celebrara la fiesta. El día estaba gris, lloviznaba. Al entrar el bullicio era ensordecedor. Muchísima gente había llegado. El olor a paella era lo primero que les dio la bienvenida.

Diego y Jazmín saludan a los familiares del tiqui, a a lgunos ya los conocían, a otros no. Sobre todo Diego se encontró con el Dani, un gran amigo bastante lejano, a quien le presenta a Jazmín, su flamante companía. Charlna un rato, en las mesas hay papas fritas, chicitos y gaseosa, aparte de bebidas alckohólicas. Ni Diego ni Jazmín quieren llenarse, salvo él que se sirve un baso de gaseosa porque tenía sed. Sigue llegando gente, saludan a nuestros amigos, comparten mesa con algunos descendientes de tiquis, es decir hijos, sobrinos. Llegan amigos de toda la vida, algunos ya conocen a Diego y lo saludan.
Mancuso dice, «Hola Diegui! Cómo andás?»

Diego lo reconoce.
Mancuso dice, «Soy el mancuso, te acordás de mí?»

Dices con acento porteño, «Mancuso! el que nunca la puso!»
Mancuso se ríe.

Mancuso dice, «Ese mismo. cómo estás che?»

Dices con acento porteño, «Eeeeh papáaa! todo piola, vo cómo andá? Seguís con eso de recreo en vacaciones?»»
Mancuso dice, «Síii, recién esta tarde terminamos.»

Dices con acento porteño, «qué bueeeno guacho, cómo no me voy a acordar!»
Cuando Diego era chico, iba a un lugar de actividades recreativas para niños llamado Recreo en Vacaciones. Diego ya no se acuerda bien las actividades que se hacían, y Mancuso, amigo del Tiqui de toda la vida, era uno de los tantos profesores. Sí se acuerda Diego que cantaba y ha llevado en alguna ocasión el teclado, y ha cantado para todos.

Mancuso dice, «Qué memoria que tenés, Dieguín!»

Dices con acento porteño, «Seee, te acordás que tocaba el teclado y todo?»»
Mancuso dice, «Síii, eras un personaje!

Dices con acento porteño, «Che, y el mancusito cómo anda?»
Mancuso dice, «AHí, después le digo que te venga a saludar.»

Mancuso dice, «Bueno Diegui, fue un gustazo verte, sigo saludando acá a los muchachos y charlamos un rato. Querés?»

Jazmín, mientras tanto, está enfrascada en una charla con las chicas que hay en la mesa.

Dices con acento porteño, «Dale papá, no te pierdas por ahí!»
Mancuso se ríe y se levanta. Al rato llega el Miliorata, otro amigo de toda la vida del tiqui. Otro que conocía a Diego, porque hubo una época en que hacía natación y era su profesor en una de las piletas, y luego le daba clases de educación física ahí mismo.

Miliorata dice, «A ver a veeer si el cabeza de corcho de Diegui se acuerda de mí?»

Dices con acento porteño, «Ese Milioraaaaaata!»
Miliorata dice, «Eeeesaaa! Cómo te acordás, eh!»

Dices con acento porteño, «Seeee! Cómo andá papá?»
Miliorata dice, «Toooodo en orden che, vos? Quué fue de tu vida? Vi que andabas en España!»

Dices con acento porteño, «Seeee, acá re piola con…»
Miliorata dice, «Esa chica es amiga tuya?»

Dices con acento porteño, «Seee»
Miliorata dice, «Qué graaaaande! Che, así que…»

Jazmín sale de su soponcio y saluda a Miliorata.

Jazmín dice, «Hola!»

Miliorata dice, «Qué tal? Mucho gusto! Yo lo conozco a él, fui su profesor de educación física»

Jazmín sonríe.

Jazmín dice, «Un gusto, yo soy Jazmín!»

Dices con acento porteño, «Seee, no me olvido más»
Miliorata se ríe.

Miliorata dice, «Y? Seguís jugando al fútbol? Tocás el piano?»

Dices con acento porteño, «Naa, no sé, hago lo que salga nomás»»
Miliorata dice, «Bueno, no lo dejes.»

Jazmín dice, «Yo me estoy encargando de que se cuide y esté bien»

Miliorata dice, «Qué bueeeno che, con minita y todo el Diegui!

Diego y Jazmín se ríen.
Miliorata dice, «Bueno, voy a seguir saludando a la banda, después los veo. Dale?»

Dices con acento porteño, «Dale papá!»
Diego y Jazmín están en la mesa. Ella charla ocn los demás, él está como mirando al infinito. De tanto en tanto se pone a mandar mensajes en el celular a sus amigos. Manda mensajes de voz, no quiere escribir, con esa voz de negro villero groncho que tantas satisfacciones le ha dado, «Cómo aaandan guaaachooos, acá de re joda con lo tiqui, con lo macho, acá re copado re contento», y una sarta de cosas dichas a lo groncho. Algunos pasan a saludar. Por fin emerge de la cocina el tiqui, el homenajeado. Cuando Diego lo ve acercarse se levanta a saludarlo.
El tiqui dice, «Cómo anda ese tiqui putín que no me saluda?»

Dices con acento porteño, «Qué hacéeee tiiiiquiii!»
Diego abraza al tiqui fuertemente.
Dices con acento porteño, «Felí cúuumple paapáaa!»
El tiqui dice, «Graaaaacia Tiqui! Cómo andá vo?»

El tiqui dice, «Tenés hambre?»

Dices con acento porteño, «Ponele, todo tranqui»
El tiqui dice, «Con ganas de joda? Mirá que después te llamamos a tocar eh!»

Jazmín saluda al tiqui.

Jazmín dice, «Síii, tiene que comer despacio y bien, si no no va a poder cantar cómodamente. Feliz cumple, Clau!

El tiqui dice, «Graaacia flacochona!»

Jazmín dice, «Que toda la luz del universo te acompañe en tu camino.»

El tiqui dice, «Graacia che!»

Sonríes.
El tiqui dice, «Tas preparado vos capochón?»

Dices con acento porteño, «Seee»
El tiqui dice, «Ayer te hiciste el rata y no viniste a ensayar, eh? Qué pasó!»

Dices con acento porteño, «No, el jueves fue»
El tiqui dice, «Ah sí, el jueves, ué te pasó cabeza de corcho?»

Jazmín dice, «Ah, disculpanos, porque nos instalamos en la casa de su abuela y yo me quedé ayudándola»

El tiqui dice, «Bueno, no importa, seguro que sale»

Dices con acento porteño, «Seee, seguro»
El tiqui dice, «Bueno, capocha, me voy a seguir atendiendo a los demás, que si no…»

Dices con acento porteño, «Dale papá, a ver qué honda esa paella.»
El tiqui le acaricia la cabeza a Diego.

El tiqui dice, «Ya va a venir.»

El tiqui se retira a seguir atendiendo a los invitados. Diego ve a lo lejos al Leto. Se levanta, a riesgos de dejar a Jazmín que nuevamente está enfrascada charlando y se va a saludarlo.

Leto grita, «Ese maaachoo caarajo!»

Dices con acento porteño, «Ese Leeetoooo la puta mareee!»
Leto grita, «Cagado de hambre papá?»

Dices con acento porteño, «Naa»
Leto se ríe.

Leto sirve cerbeza en una copa.

Leto dice, «Tomaste vos?»

Dices con acento porteño, «Naa, pero dame si queré»
Leto dice, «Tomá, puto! Un buen macho chupa a la primera! Dale!»

Diego bebe sin drama.
Leto dice, «Te trajiste a la Jazmi?»

Diego la señala por toda respuesta, unas mesas más allá.
Leto se ríe pícaro.

Leto dice, «Boludo, la estás haciendo feliz en la cama? Está tan buena esa guacha que…»

Dices con acento porteño, «See, no te preocupes. Le arranco unos orgasmos de la concha de su hermana.»»
Leto suelta una gran carcajada,

Leto grita, «Bieeeen ahíiii puuutooo!»

Diego se ríe.
Leto dice, «Y jime como toda una…»

gritas: «Se seee!»
Leto ríe y la mira. Jazmín desde donde está le devuelve un gesto a modo de saludo y una mirada desprovista de deseo, ganas de acostarse, coqueteo y todo lo que se esperara. Le devuelve la mirada de una conservadora que le quiere dejar en claro que no va a caer en sus provocaciones, pero el Leto parece no dar bola. En todo caso ya no insiste.

Dices con acento porteño, «Y la maruja?»
Leto dice, «Ahí está la maruja, te llevo con ella?»

Dices con acento porteño, «Che, y el Gago?»
Leto dice, «El puto del Gago se quedó en Brasil.

Dices con acento porteño, «Uuu…»
Leto dice, «Te llevo con la maruja?»

Dices con acento porteño, «Dale»
Diego y el Leto van unas mesas más allá, ahí está la maruja con otras chicas.
Maru dice, «Hola mi amor!»

Maru mira a Diego coquetamente.

Dices con acento porteño, «Eaea esa maruja!»
Leto dice, «La marujiiiita!»

Maru le da un beso en la boca dejándole un sabor a frutas que Diego sabe de qué es, pero no sabe de qué es. Y al pensarlo se ríe.

Un rato después se empieza a desparramar la paella. Ha llegado Maxi por suerte, y se acercó a saludar a nuestros amigos que habían vuelto no solo a estar sentados en sus mesas, sinó que ahora Jazmín estaba dedicando toda su atención a Diego y charlaban de cualquier cosa. Recordemos que a Jazmín no le agradan estos ambientes, pero intentó hacer su mayor esfuerzo para soportar y estar hasta tarde. No quiere perderse el concierto. Junto a Maxi ha llegado la María, su novia. Diego la oyó nombrar vagamente, pero jura que no la conocía. Que el putilín de Maxi jamás se la había presentado. No le cayó mal, pero le pareció una mujer madura y tranquila, lo que extrañó a nuestro amigo porque se supone que a Maxi le gustan las pendejas.

Y ahora sí, se sirve la paella. Le traen un plato con una porción (con Carne) a Diego, otra porción vegetariana para Jazmín. El tiqui al saberlo lo tuvo en cuenta, ha anotado entre otros datos las personas que cenarían paella vegetariana. Es todo lo mismo salvo que no tenía nada de carne, por lo que para eso Diego prefiere comer hasta donde le entre con carne.

Jazmín dice, «Despacio, Diegui, que tiene muchas cosas y te va a caer mal.»

Diego sigue comiendo y al rat
Jazmín dice, «Vos pedime paella, mi Diegui, síi? Yo cuando volvamos a España te cocino una.»

Dices con acento porteño, «Con carne?»
Jazmín dice, «Siii siii»

El abuelo coco que está a la izquierda de Diego dice, «Hay que aprovechar, que la paella no es algo muy común»

Dices con acento porteño, «Seee»
Jazmín dice, «En España sí se come»

El abuelo Coco dice con acento gaucho, «En España vas a comer la paella verdadera.»

No tiene pescados. Mejor en opinión de Jazmín, ya que con solo ver mariscos en un plato siente un asco que a duras penas puede disimular. Sí contiene pollo, cerdo, chorizo colorado, algunos huesos que el abuelo le saca del plato amablemente.

Jazmín dice, «Diegui, despacio, que después no vas a poder cantar bien.

El abuelo Coco dice con acento gaucho, «Saboreaaaalo Carlito, saborealo!»

Diego se ha comido 3 platos en total. Para cuando va terminando el tercero, ya no da más. Jazmín se da cuenta, pero tras tomar coca ahí viene lo primero. Diego está con un ataque de hipo, que simplemente lo está dejando salir.
Jazmín con paciencia está dándole suaves golpecitos en la espalda, dándole agua. Diego cuando dice algo se va interrumpiendo entre hipidos, y Jazmín con mucha paciencia le trata de dar agua, hacerlo respirar profundo. Gracias a Dios no dura tanto, hasta su abuela le ha tenido que llamar la atención.

Diego un ratito después se levanta (Jazmín está charlando y no lo retiene) su abuelo le pregunta a dónde va, él le dice que va con los machos del barrio, ya vuelve, y en efecto se va hacia unas mesas más adelante. AHí están los machos y algunos amigos del tiqui. La maruja está con ellos, la María también. Diego les chamuya un rato, siempre a gritos (en Argentina y en las fiestas las cosas se dicen casi siempre a gritos) y la María le hace preguntas, lo quiere conocer, Diego es cortez y educado pero al que más está interesado en joder es a Maxi. Un rato después Diego regresa al lado de Jazmín, le llama la atención, ella le sonríe y vuelven a charlar de lo lindo, siempre a los gritos debido al bullicio, Diego responde algunos mensajes que les mandan sus amigas. Habla por ejemplo con Luhanna. Le mandó un mensaje con esa voz de groncho que le caracteriza, contándole de los machos y los tiquis, de la paella que se comió, que Jazmi le manda saludos, que ahora van a tocar y cuando lo llamen a cantar por ahí si se acuerda graba algo. También le manda le manda un mensajito a Kajol. No le pregunta cómo está, simplemente le cuenta lo mal que se está portando, cómo se está emborrachando, cómo corrompe a Jazmín, por supuesto riéndose y dejando en claro que solo jode. Luhanna y algunos otros amigos sí le contestan, le desean suerte, que no tome mucho, que grabe
cuando cante, y Kajol jamás ha contestado. Mientras tanto ahí los tiquis han conectado micrófonos, guitarras, bajo, batería armada, están tocando algunas notas para hacer prueba de sonido, regulan el volumen, la ecualización, Jazmín les saluda con la mano, Diego está de lo más entretenido en el móvil. Los tiquis comienzan a tocar. Cuando están por empezar la primera canción
gritas: «»Vaaamooo lo tiiiquiii!»
Gente del público replica y se ríe. Jazmín y su abuelo también, o Diego a ellos sí los oye.

El tiqui dice al micrófono, «El Dieguíiiin!»

gritas: «Qué paella que se mandaron cheeeee!»»
El público se ríe. El tiqui (siempre a la cabeza) marca los 4 tiempos con los palitos y ahí empieza su primera canción. Las primeras canciones son en inglés. Quien canta es el Manu. A Diego no le gusta, opina que Claudio canta mejor. Tomi la rompe con la batería. De tanto en tanto, Diego lo que hace es responder algunos mensajes o leer lo que le escriben, y donde responde y manda un mensaje de audio, supone que se re escuchará lo que tocan los tiquis porque además suenan a gran volumen.

El tiqui dice al micrófono, «Bueno. Ahora, les tengo a un invitado muy especial que les va a interpretar algunas canciones. Es alguien que estuvo viviendo en España.»

Desde la triguna ya hay bastantes ovaciones y silbidos. Mucha gente sabe a quien se refiere el tiqui, y más aún cuando señalan al nuevo invitado. La gente está como loca. Algunos silban, otros putean.

El tiqui dice al micrófono, «Vamos a recibir con un fuerte aplauso al Dieguíiiiin, el tiqui putíiiiiin!»

La gente aplaude enloquecida. Se oyen los gritos de las chicas. Nuestro amigo con los nervios a flor de piel (a tal punto que directamente no intenta poner a grabar) se levanta, alentado por Jazmín que rápidamente le da un beso para darle ánimos, lo que ocasiona más ovaciones y gritos de la hinchada, levanta el culito de la silla y tratando de disimular lo mejor que puede se acerca al escenario.

La triguna grita, está como loca. Diego llega al escenario y ahí está con los tiquis, ellos tocando algunos acordes en la guitarra, él tiene un piano delante.

alguien del público grita, «Vaamooo puuuutooooo!»

Alguien grita desde la triguna, «Ese Dieguíiiiiin!»

Diego dice al micrófono, «Bueeeenas buenas buenas buenas bueeenaaaas, guachos y guachas! Machos y Tiquis!»
El público aplaude y grita.

Diego grita (siempre al micrófono) «Nos vamos a dejar de joder con música de Tiquis y ahora se viene lo bueno cheeeee!»
Tomi está golpeando un cencerro.

El público sigue como loco. Diego voltea, mira y saluda a la numerosa cantidad de chicas del público y ellas responen gritando, como en un recital de cumbia villera.

Diego dice al micrófono, «Primeramente, guachos, quiero saludar acá al tiqui mayor, al cabeza de corcho… Al cumpleañero!»
La gente aplaude y ovaciona.

Alguien grita desde la triguna, «Cantáaaa pedazo de puuutoooo!»

Diego dice al micrófono, «A toda la mina que no hacen el aguante looocoo, a todo lo maachooo»
La gente sigue gritando, algunos ovacionando a Diego, otros puteando como en la cancha de fútbol.

La hinchada ya le está cantando, «Oléee olée oléee, oléee olée oláa, oléeee oléee olée, cada día te quiero más»

Tomi está haciendo una suerte de batucada con el cencerro y algunos parches. Mucha gente del público dice, «El Diego es un sentimieento, no puedo paraaaar»

Leto grita desde alguna parte, «Saludo a la maruja pedazo de puuutoooo!»

Diego que está disfrutando de cómo le canta la hinchada grita por el micrófono, «Un saludo a la Marujiiiitaaa!»

Más obaciones y gritos de la hinchada.

Jazmín le hace señas desde su lugar.

Diego grita al micrófono, «Otro saludo para La Jazmi! (la señala)y la gente vuelve a gritar y aplaudir.

Diego dice al micrófono, «Y bueno, ahora vamo tooodo lo guacho con las palmas arriiibaaaaaaaaaa!»