Nueva escena de rol: Una comunicación urgente

Punto de vista: Beatriz

sales del elevador.

La planta número 4

Te encuentras en una de las plantas de un edificio de viviendas. Aquí se encuentran las casas de los jugadores del Mud.

Ves un departamento confortable de color azul, casa de arnulfo de color gris perla, hogar de dámaso de color verde agua, casa de zulema, y el ascensor de la torre de Madrid aquí.

Beatriz echa un vistazo y enseguida detecta la puerta desde donde proviene la fetidez.

Da un par de pasos conteniendo la respiración y pulsa el timbre junto a la puerta.

Diez minutos más tarde…

Beatriz vuelve a tocar y está a punto de irse.

La puerta de casa de Zulema ha sido abierta desde dentro.

Zulema sale de una casa.

Zulema cierra la puerta de su casa.

Beatriz va a tocar el timbre de la casa una vez más.

Zulema te mira.

Beatriz toca el timbre repetidas veces y bufa.

Beatriz se fija en la chica que acaba de salir

Zulema se acerca a la chica y la mira, al observar su placa suspira de alivio

Dices con acento Marroquí, «Oye, por casualidad sabes quién vive ahí?»

Beatriz apunta a la casa de Dámaso.

Zulema dice: «un tal Dámaso, pero tiene un aroma insoportable esa casa, a lo mejor se a muerto o algo»

Beatriz sostiene en la mano un sobre con el que se sacude para espantar la pestilencia.

Beatriz tuerce la boca.

Zulema dice: «realmente huele mal»

Dices con acento Marroquí, «Pues mira, más vale que no haya cruzado al otro lado.»

Zulema llama a la puerta de casa de Arnulfo.

La puerta de casa de Arnulfo ha sido abierta desde dentro.

Dices con acento Marroquí, «porque me va a cabrear mucho.»

Arnulfo sale de una casa.

Beatriz mira al vecino que acaba de abrir la puerta.

Arnulfo sale de la casa con una pelota en la mano

Zulema dice: «mira, este es otro vecino, él conoce mejor a Dámaso»

Dices con acento Marroquí, «a ver, sabes quién es el que vive ahí?»

Arnidrú sale disparado

Beatriz alza la ceja al ver al chucho

Dices con acento Marroquí, «a ver, el caso es que me pidieron el favor de entregarle una comunicación al que vive ahí dentro.»

Beatriz señala la casa de Dámaso con gesto adusto.

Arnulfo saluda a las mujeres, mientras lanza la pelota a la casa para que entre el perro

Dices con acento Marroquí, «Pero toco y toco y el tío no sale.»

Dices con acento Marroquí, «Lo has visto?»

Arnulfo dice: «bueno es que se fue a Alcalá, que ahí trabaja»

Zulema dice: «pues menos mal que organice esa pestilencia porque huele terrible»

Dices con acento Marroquí, «Aquí la joven dice que capaz estiró la pata.»

Arnulfo ríe un poco

Dices con acento Marroquí, «Joder, menuda… «

Arnulfo dice: «pues a menos que tenga el don de ver a los muertos, porque lo vi hace como quince minutos»

¡Con el coso alivianao! Mundo virtual guardado.

[Humor cyberlifeano]: “Hasta el MUD reconoce que al Dámaso se la suda en grande”

Dices con acento Marroquí, «En fin, cuál de vosotros se ocupa de recibir esta comunicación?»

Arnulfo suspira

Beatriz mira a uno y a otro

Arnulfo dice: «yo la recibo y se la hago llegar en cuanto lo vea»

Zulema dice: «los dos, creo el que lo vea primero, pues mejor para él»

se oye ladrar a Arnidrú dentro de la casa

Dices con acento Marroquí, «Vale, le diré al administrador que… cómo es que te llamas?»

Arnulfo dice: «Arnulfo, señorita»

Dices con acento Marroquí, «Vale, Arnulfo. Eres responsable de la comunicación, no vayas a perderla porque si no, a saber cuándo finalizará este hedor.»

Dices con acento Marroquí, «y comienzo a cansarme de que parezca que tengo el trabajo en casa.»

Arnulfo dice: «descuide, que estaré al pendiente de su llegada, que hasta animales tengo en mi casa»

Zulema dice: «terrible»

Dices con acento Marroquí, «vale»

Arnulfo mira a Beatriz como diciendo: qué le digo

Beatriz asiente en acuerdo con la chica.

Zulema dice: «llevamos días con este hedor»

Arnulfo asiente, comprensivo; sabe que pese a la amistad, el hedor es insoportable

Dices con acento Marroquí, «me lo dices? Y mira que No vivo tan cerca, eh? voy unas plantas más arriba. pero ya el tufillo llega cuando hace brisa.»

Zulema dice: «pues imagínese aquí abajo»

Arnulfo dice: «bueno yo lo tengo enfrente, así que…»

Dices con acento Marroquí, «Y para mi desgracia, el primo del administrador me conoce y no para de quejarse.»

Arnulfo dice: «y justo acabo de matar una rata tamaño conejo que se metió a mi casa»

Dices con acento Marroquí, «Pues eso, ni os imagináis el resto de vecinos el cabreo que llevan.»

Dices con acento Marroquí, «qué diablos le pasa por la cabeza a ese sujeto?»

Zulema dice: «quien sabe, a lo mejor necesita un psicólogo»

Arnulfo dice: «ya una vez le dije que no sé cómo se puede vivir en el desorden, pero ni por esas»

Dices con acento Marroquí, «lo que necesita es un agente de control de plagas que lo fumigue.»

Arnulfo dice: «bueno con lo que ha pasado, no sé»

Beatriz levanta una ceja.

Dices con acento Marroquí, «a qué te refieres?»

Arnidrú sale disparado con algo que parece el cadáver de una rata

Arnulfo mira al perro y niega

Beatriz se fija en el chucho y frunce el entrecejo.

Zulema dice: «madre, encima un perro»

Arnulfo murmura: «no me digas que…»

Arnulfo dice: «no, no, él es mío»

Dices con acento Marroquí, «Esto no pinta bien, eh?»

Zulema murmura: «eso es una rata?»

Zulema murmura: «oh, mondieu «

Dices con acento Marroquí, «tiene toda la pinta de que lo fue en algún momento.»

Zulema se lleva las manos a la boca

Beatriz se inclina hacia el chucho sin tocarlo.

Arnulfo dice: «sólo que seguro que en mi casa había otra rata y él la ha encontrado»

Beatriz se levanta con la expresión seria.

Beatriz mira a ambos

Arnulfo enrojece de vergüenza

Dices con acento Marroquí, «Yo de vosotros aseguraba las puertas y cualquier orificio que tengáis en casa.»

Arnulfo dice: «Arnidrú, adentro,!»

Zulema dice: «sí, vamos a necesitarlo»

Beatriz aguarda para ver si el chucho obedece

Murmuras con acento Marroquí, «a este le hace falta un poco de entrenamiento.»

Arnulfo dice: «es que también hay insectos en mi terraza, así que… ains qué horror»

Beatriz niega con la cabeza y suspira.

Arnidrú entra corriendo a la casa

Beatriz mira su reloj

Zulema dice: «pues tendrá que llamar a un fumigador»

Dices con acento Marroquí, «Mirad, tengo guardia y no puedo seguir en estas.»

Zulema dice: «lo comprendemos»

Arnulfo dice: «ya lo llamo, pero mientras mi vecino no controle su ganado, pues la llevamos mal»

Arnulfo dice: «entiendo»

A Beatriz se le cae la carta al suelo.

Arnulfo se inclina para recogerla

Dices con acento Marroquí, «disculpa, la falta de sueño me lleva fatal.»

Arnulfo dice: «disculpen las molestias»

Zulema dice: «entre el sueño y el olor»

Arnulfo la mira como diciendo: sé de eso

Dices con acento Marroquí, «pero si la casa no es tuya.»

Zulema dice: «exacto, la casa no es tuya»

Arnulfo dice: «es que él es mi amigo»

Dices con acento Marroquí, «la vergüenza la tendría que tener el fulano Dámaso.»

Zulema dice: «da igual, sigue sin ser tuya la casa»

Dices con acento Marroquí, «Hala, lo dicho.»

Arnulfo aguanta las náuseas

Arnulfo dice: «Dios que he visto y olido de todo, pero esto me supera»

Dices con acento Marroquí, «A ti solo no, guapetón. Y eso que debería de estar acostumbrada.»

Dices con acento Marroquí, «pero se ve que no.»

Arnulfo dice: «en fin, que ya hablaré con él»

Arnulfo señala su casa

Dices con acento Marroquí, «en fin, esperemos que esto se resuelva pronto.»

Arnulfo dice: «yo también, por el bien de todos y más que nada por el bien Del propio Dámaso; ,que esto ya es un foco de infección»

Dices con acento Marroquí, «Gracias, me ahorras un mal rato.»

Beatriz le guiña un ojo a Arnulfo.

Arnulfo sonríe levemente

Arnulfo mira a Zulema

Dices con acento Marroquí, «Nos vemos.»

Arnulfo dice: «lo siento, que lo tienes al lado toda esa pestilencia»

Beatriz mira a la chica y se compadece.

Zulema dice: «no te preocupes»

Zulema dice: «no es tu culpa»

Dices con acento Marroquí, «Menuda paciencia tienes, preciosa.»

Zulema dice: «y cuando veas a tu amigo dile que tenga la cara de presentarse ante toda la comunidad que esto es in a ceptable»

Arnulfo dice: «yo limpiaba el tiempo que viví ahí, pero eso, no es mi casa»

Beatriz levanta las cejas.

Arnulfo se pone firme por puro instinto

Dices con acento Marroquí, «bueno, ahora sí, huyo por la izquierda.»

Beatriz observa la expresión corporal del joven y frunce el entrecejo.

Arnulfo dice: «hasta luego y en serio, ojalá que entre en razón, que por muy mi amigo que sea no podemos permitir esto»

Beatriz asiente con un cabeceo leve y se vuelve.

Zulema dice: «cuidaos ambos»

Zulema abre la puerta de su casa .

Dices con acento Marroquí, «Esperemos que sí.»

Zulema entra en su casa .

La puerta de casa de Zulema se cierra.

Dices con acento Marroquí, «Igualmente «

entras en el ascensor de la torre de Madrid.

el ascensor de la torre de Madrid

Al ingresar al ascensor, puedes ver tu reflejo en el espejo de medio cuerpo que se encuentra colocado en la pared posterior de la cabina. Si giras 180 grados, del lado derecho observas el tablero con los botones, los cuales van enumerados agrupando los números pares en la primera columna y los impares en la segunda. Sobre el tablero, una pequeña pantalla digital indica el número de planta, el ascenso y el descenso, mediante una flecha apuntando hacia arriba o abajo según sea el caso. Este ascensor te permitirá acceder a las diferentes plantas del edificio, Teclea ‘ir’ para acceder al menú de plantas.

El ascensor cierra las puertas y se pone en marcha.

El ascensor de la torre de Madrid para en La planta baja y las puertas se abren.

sales del elevador.

Dices con acento Marroquí, «Rey, me las vas a pagar por meterme en estos follones, verás tú, cabroncete.»